Por qué es importante la conductividad térmica en un aislante

En un post anterior relacionado con la protección contra incendios en Valencia desarrollamos el concepto de material ignífugo. Para nosotros es importante que comprendas el funcionamiento de los materiales que se utilizan para proporcionarte protección frente al fuego. Por eso, en esta ocasión, introduciremos las bases de lo que convierte un material en un buen aislante: su conductividad térmica.

La conductividad térmica es una propiedad física empleada para definir la capacidad de una sustancia de transferir energía cinética de sus moléculas a otras. En primer término, es la transferencia de una gran energía cinética entre moléculas la responsable de la aparición de suficiente energía para desencadenar un incendio. Los metales, por ejemplo, presentan una elevada conductividad térmica. Por contraposición, los polímeros y aislantes térmicos apenas conducen el calor. Resulta fundamental en un material destinado a proteger nuestras viviendas y negocios poseer una baja conductividad.

Cuanto mayor es la energía cinética de las moléculas, más aumentará su capacidad de movimiento y, con ella, la transmisión de esta energía. Para la protección contra incendios en Valencia se emplean materiales con conductividades tan bajas como 0,03-0,07 W/(K·m), frente a la del acero, que presenta 47-58 W/(K·m).

Pero la conductividad no solo depende de la tendencia de los materiales a transferir energía cinética. También es posible obtener un buen material aislante aumentando el espacio existente entre sus moléculas. Así, podemos encontrar materiales con resistencia a transmitir energía cinética entre las moléculas, como es el caso de los fibrosilicatos; estructuras como los conductos de circulación, que permiten una evacuación de esa energía cinética convertida en térmica, y la lana de roca, donde combinamos una baja conductividad con amplios espacios intermoleculares.

Desde Isospray Levante, S.l. siempre estamos deseosos de emplear las mejores técnicas y conocimientos para hacer posible una protección fiable de hogares y negocios frente al fuego.